Maldita Primavera... (aunque ya es verano...)
Este día a sido como escuchar todas sus horas una radio A.M.
He recordado todo lo que paso entre nosotros. Todo el daño. El físico, el psicológico y sobre todo el emocional.
Recordé mentiras e insultos disfrazados.
Te entregue mi infancia y la destruiste.
Te entregue mis sueños y los despertaste.
Te entregue a la mujer y la ultrajaste.
No te despediste, solo subiste a un taxi corriendo, dejándome abandonada en día festivo.
Sola en la noche con un punto suspensivo que hasta el día de hoy hace que me despierte agitada.
No sigas perturbándome que estoy intentando reconstruir lo que dañaste.